Artículo de opinión

El 17 de septiembre la presidente de FEC Burgos, Consuelo Fontecha, envió el siguiente artículo de opinión al Diario de Burgos.  

OTRA VEZ CON EL PIE CAMBIADO

Pudiese ser que la coordinación no fuese nuestra gran virtud y esto despejaría todas las dudas sobre el empeño de llevar, en el momento menos oportuno, el pie cambiado. Oye, igual que sucede con los primeros días de clase en los gimnasios, que cuando tú quieres ir, el profesor y el resto de alumnos aventajados ya han vuelto en la coreografía. Pues eso.

Hace apenas unas semanas, los medios de comunicación recogían la información sobre los avances de la aprobación del plan parcial del parque comercial de Cortes por parte del Ayuntamiento de Burgos. Un nuevo proyecto, que junto con el resto de iniciativas proyectadas de áreas comerciales, simulan un complejo de satélites que rodean nuestra ciudad.

Y en esas estamos, apostando (públicos y privados) por la creación de espacios comerciales a las afueras de la ciudad, mientras que en otros territorios diseñan e invierten en las ciudades denominadas “de 15 minutos”, como entornos urbanos que recogen los servicios y la oferta comercial en radios que pueden satisfacerse en 15 minutos andando.

Un término acuñado por el urbanista Carlos Moreno, que recoge los distintos desafíos ecológicos, económicos y sociales en su libro La revolución de la proximidad: De la «ciudad-mundo» a la «ciudad de los quince minutos» y que tomo como referencia porque sintetiza en su título, el significado de este artículo de opinión.

Y es que este alegato por una ciudad cohesionada, se basa exclusivamente en el sentido común. La proliferación de parques y áreas comerciales dispersas por la ciudad de Burgos y su alfoz, va en contra de la tendencia demográfica y de la necesaria sostenibilidad: ¿qué ventajas tiene la dependencia del transporte para ir de un sitio a otro? En pocos años vamos a parecer un capítulo de los dibujos animados autos locos recorriendo de punta a punta la ciudad, atravesando calles vacías, con conductores que de media rozarán los 90 años de edad. Un escenario de lo más apetecible, ¿verdad?