El martes día 9 de enero se alcanzaba un preacuerdo entre los integrantes de la mesa negociadora, firmado por UGT (mayoría de representación por parte de los trabajadores) y la Federación de Comercio de Burgos, para la renovación del convenio de equipamiento de la persona por un periodo que alcanza hasta el 2026, tras haber finalizado su vigencia el 31 de diciembre de 2020.

Un preacuerdo que desde FEC Burgos se tilda como “fallido” ante las propuestas que se dejan fuera tras la falta de flexibilidad en la negociación por parte de UGT, que exclusivamente ha marcado como línea roja, el complemento de las Incapacidades Temporales (IT) frente a otros planteamientos como el de mejora salarial y complementos por los días festivos trabajados, alternancia de sábados laborales…. que desde FEC Burgos se había planteado como objeto de negociación y que beneficiaría al conjunto de los trabajadores de este subsector.

El enrocamiento por parte de UGT con las IT ha excluido otras líneas de negociación en materia laboral para el sector del textil y el calzado, que desde la patronal se consideran relevantes para la fidelización y la incorporación de nuevos trabajadores en las plantillas.

La presidente de FEC Burgos, Consuelo Fontecha, considera que se ha perdido una oportunidad para la estabilización de las estructuras empresariales del sector.